FRANCISCO DE ASÍS: Interpelación

PRINCIPAL
EREMITORIO
VOCACIÓN
FRANCISCANISMO
Catequesis franciscana
Francisco: Escritos, etc.
Clara de Asís
Enlaces franciscanos
Recursos franciscanos
CAPUCHINOS
VIRGEN MARÍA
ORACIÓN
RECURSOS
ENLACES

 

Como ya hemos visto la vida de Francisco fue cambiando poco a poco. En el principio lo único importante era la riqueza y el poder. Ciertamente que esto en sí mismo no es malo y que él era un practicante normal. Se dice que sabía leer y entender latín por haber ido frecuentemente a misa.

 

Pero Francisco fue cambiando. No era feliz con “cumplir”. En su interior le faltaba algo. Para él la fe y la oración eran importantes, pero no eran su vida. Era sensible ante los sufrimientos de los demás pero le faltaba algo.

 

Un día, como ya vimos antes, estando él solo en la iglesita de San Damián, rezando y buscando sentido a su vida, con toda sencillez y valentía le pregunto al Señor, ¿ Qué quieres que haga ? Esa fue la pregunta que cambió de verdad su vida. Mejor dicho, la respuesta que recibió por parte de Dios: Y tú, Francisco, ¿quieres seguirme totalmente? Esta pregunta si que llegó al corazón mismo de Francisco. No sabía qué responder, ni fue fácil hacerlo. Pero poco a poco, como se hacen las cosas importantes de la vida, fue pensando, fue rezando, fue preguntándose, fue sincerándose… Y finalmente su respuesta, fue ¡SI! De esta manera encontró: su vida, su vocación y su felicidad.

 

Amigo, me apresuro a decirte algo lógico: no todos tenemos que seguirle de igual modo, con el mismo estilo de vida, con la misma vocación. Pero sí tenemos que buscar de verdad, valiente y sinceramente, nuestra vida, nuestra vocación, nuestra felicidad.

 

Francisco la encontró por medio de su generosa respuesta a Dios. ¿Y Tú? ¿La has encontrado ya? ¿Has comenzado a buscar de verdad? ¿Le has preguntado al Señor sinceramente? !!Animo y respóndele!! No tengas miedo. El Señor te quiere y te ayudará a ser feliz. Tú pon lo que este de tu parte y déjale a Él el resto: te ayudará siempre. Y no olvides que lo importante es ser buena persona y buen cristiano. Cada uno desde nuestra propia vocación. Yo sólo he pretendido mostrarte un estilo de vida cristiana, siendo franciscano, en cualquiera de sus formas.

 

Gracias, por dedicarme tu tiempo y espero haberte ayudado.

 

,